Algo muy interesante y que nos invita a "abrir" nuestra mente es el artículo periodístico que nos ofrece la Editorial Página 12. Analizarlo para comprobar cuando una huida es productiva o un acto terapeútico. Los comentarios los pueden hacer. ANTE EL RIESGO DE LAS “RELACIONES TOXICAS” Poroto enseña la ciencia de la huida Aprendiendo de su propio personaje “Poroto”, el autor advierte sobre las relaciones “tóxicas” que “reducen la potencia de actuar”, a diferencia de “los buenos encuentros, que producen afectos alegres”. De aquellas relaciones es mejor huir, porque, citando a Poroto, “la huida no es una enfermedad, sino una ciencia”. Por Eduardo Pavlovsky En mi obra de teatro Poroto, el protagonista es estratega de una micropolítica que le permite expresarse para vivir. Se da cuenta de que tiene que seleccionar en su vida las relaciones: las dosis de las relaciones, el tiempo que invierte para que le resulte operativo vivir como él desea, que le permite vivir con potencia. Las
..... Rehaciendo entramados